Deterioro físico y psicológico en adultos mayores, se acelera en cuarentena

Una investigación de la Universidad Manuela Beltrán, reveló que el deterioro físico y psicológico de los adultos mayores, confinados en Colombia desde el 20 de marzo y por lo menos hasta el 31 de mayo, se acelera durante el encierro. Datos similares hacen eco de esta investigación en otras regiones del mundo.

De acuerdo con la investigación, realizada en una muestra de 200 adultos mayores con un promedio de edad de 71 años, el 46% de ellos reveló un incremento en deterioro en sus procesos cognitivos frente a 51% que evidencio este deterioro dentro del rango normal o esperado.

Otro dato revelador de la investigación, tiene que ver con que las mujeres presentaron este deterioro con una frecuencia del 33% frente a una frecuencia del 13% en los hombres que participaron del estudio.

Guía rápida contra el coronavirus COVID-19

Antes de ésta, la más reciente pandemia en la historia de la humanidad se presentó a comienzos del siglo XX con la llamada gripe española, con una cifra de muertos superior a los 50 millones de personas, lo que equivale a la población actual de Colombia. Por fortuna el coronavirus ha demostrado, hasta el momento, una mortalidad baja pero desafortunadamente un alto nivel de contagio. Y es por esto que es importante tomar medidas para evitar contagiar a poblaciones en riesgo (adultos mayores de 60 años y pacientes con enfermedades crónicas) y para controlar el número de enfermos de modo que el sistema de salud pueda dar a basto con los recursos disponibles.

Tal vez el peor virus es el de la desinformación y el pánico pues nos lleva a tomar decisiones equivocadas que poco ayudan o, incluso, favorecen la expansión del virus. Es por ello que en PSICOSAPIENS colocamos a su alcance esta guía rápida contra el coronavirus, la COVID-19, para que tenga información clara y a la mano para actuar rápida y oportunamente. Recuerde siempre consultar fuentes oficiales como las del Ministerio de Salud de Colombia o las de las respectivas Secretarías de Salud de su departamento o municipio ante cualquier duda. Las alcaldías están en la obligación de habilitar líneas telefónicas para consultas y eventualmente para el envío de personal médico a su domicilio.

¿Cómo prevenir el contagio?

  • Lávese las manos con frecuencia con un desinfectante de manos a base de alcohol o con agua y jabón.
  • Tosa o estornude cubriéndose la boca y la nariz con el codo flexionado o con un pañuelo.
  • Evite tocarse los ojos, la nariz y la boca.
  • Mantenga al menos un metro de distancia entre usted y las demás personas, sobre todo con aquellas que tosan, estornuden y tengan fiebre.
  • Evite tocarse los ojos, la nariz y la boca.
  • Limite al máximo las reuniones numerosas.

¿Qué hago si sospecho que estoy contagiado?

Si cree que puede padecer el coronavirus porque presenta síntomas compatibles, como fiebre, desaliento o tos seca o si ha viajado o ha tenido contacto reciente con personas de zonas consideradas como foco de infección, tales como España, Italia, China, Corea del Sur, Singapur o Irán, por favor siga el siguiente protocolo:

  1. Aíslese.
  2. En la medida de lo posible, no se desplace a su IPS para evitar contagiar a otras personas.
  3. Llame a la línea de atención de su municipio. En el caso de Medellín es el 123 y para el departamento de Antioquia el #774, donde le indicarán si los síntomas ameritan una visita médica domiciliaria o no.
  4. Si los síntomas son leves, lo más probable es que deba mantener el aislamiento en su domicilio, si son graves, deberá ser hospitalizado.

¿En qué consiste el test del coronavirus?

El test se basa en la toma de muestras del tracto respiratorio. Lo puede realizar un médico en su domicilio cuando el caso es asintomático o los síntomas son leves. También puede realizarse en un centro de salud, si el paciente se encuentra ingresado por un cuadro grave.

Si la prueba es negativa, el caso se descarta. Solo si la prueba es positiva o no concluyente, se toman nuevas muestras y se avisa a la entidad seccional de salud.

¿Qué pasa si confirman que tengo el coronavirus?

Si no presenta síntomas o los síntomas son leves, las autoridades sanitarias seguramente le prescribirán el aislamiento domiciliario y que extreme las medidas higiénicas para no contagiar a cuidadores. Estas medidas incluyen el uso de mascarillas, lavado de manos con agua y jabón o un desinfectante. La mayoría de las personas, cerca del 80% se recuperan de la enfermedad sin necesidad de realizar ningún tratamiento especial.

Recuerde que por el momento no hay ningún medicamento antiviral específico para tratar el COVID-19, ni vacuna.

¿Cómo convivir con alguien contagiado con coronavirus?

Para aislar a una persona contagiada con el coronavirus en su propia casa, es conveniente que disponga, por lo menos, de una habitación y un baño exclusivos para él, de modo que disminuyan las probabilidades de contagio para las demás personas que conviven con el enfermo. Es importante mantener al menos un metro de distancia con cualquier caso positivo.

¿Cómo se que me he curado?

Para saber con certeza que un paciente se ha curado del coronavirus, después de padecerlo, se deben tomar dos muestras respiratorias separadas de al menos 24 horas entre cada una de ellas y ambas deben dar negativas.

¿Puedo volver a contagiarme?

Llevamos muy poco tiempo de estudio del coronavirus (recordemos que se supo de él a finales de diciembre de 2019) de modo que no se sabe a ciencia cierta. Al parecer hay un caso documentado en China, en el que pare que efectivamente hubo reinfección.

¿Dónde puedo encontrar más información sobre el coronavirus en Colombia?

Para más información por favor consulte la página web del Ministerio de Salud en el apartado dedicado al COVID-19, haciendo clic aquí.

“Si existe algún tipo de Complejo entre padre e hijo este es el de Cronos y no el de Edipo”

Por: Carlos Andrés Naranjo Sierra
Con el título de este artículo realicé un tuit luego de una ligera reflexión sobre los padres que suelen quejarse del exceso de cuidados y atención que provee la madre a sus hijos. Algo parecido a los celos agresivos que relata Sigmund Freud en el Complejo de Edipo, pero en un sentido opuesto del vector, no de hijo a padre sino de padre a hijo.

Por eso el título de este artículo es condicional, no toma como afirmación su enunciado sino que pretende conducir a la reflexión sobre uno de los pilares del entramado del edificio psicoanalítico y propone una visión opuesta, en términos vectoriales, para la supuesta dirección que recorre la agresividad en la relación entre el infante y su figura paterna.

Lo primero es aclarar que lo que llamamos figura paterna puede ser representada en el Homo sapiens, y en otras especies animales como los primates, por parientes cercanos que no necesariamente son de sexo masculino. Estructuras matriarcales sirven de ejemplo en ambos casos. Hay un miembro alfa, masculino o femenino, que ejerce el control sobre los demás miembros de la manada.

Edipo en el destierro, guiado por Antígona.

El Complejo de Edipo, enunciado por Sigmund Freud, plantea que hay un vector de agresión que va del hijo hacia el padre, recapitulando el parricidio original de la horda primitiva relatado en Tótem y Tabú, y que pasa por el deseo sexual hacia la madre, o el padre dependiendo del caso, y finaliza generalmente con la capitulación del pequeño, que opta por buscar su objeto de deseo por fuera de la propia familia.
Varias dudas conceptuales y psicobiológicas han sido denunciadas sobre esta idea freudiana, pero bástenos con mencionar la falta de desarrollo endocrino en el pequeño para tener deseo sexual y el llamado Efecto Westermarck, que afirma que, contrario al deseo incestuoso natural del Edipo, lo que realmente existe es un desinterés incestuoso, claramente comprobado en nuestra especie y en otras especies animales.

Cronos devorando a uno de sus hijos.

Pero ¿podría existir un vector de agresión opuesto, que fuera en la dirección padre-hijo siendo así el progenitor el que deseara la muerte de su pequeño, tal como el mito del titán Cronos que devora a sus hijos? Los casos de celos por la atención de la madre, relatados por cientos de padres parecían un buen indicio.De modo que comencé a investigar al respecto. Homines sapientes, leones, chimpancés, bonobos, perros, elefantes. En todos los casos era claro que pasado un tiempo, cuando el retoño llegaba a la pubertad, se detonaba un mecanismo evolutivo que sacaba a las crías del nido. ¿Era este mecanismo una muestra de la existencia del Complejo de Cronos? No necesariamente, además no era comparable con el Edipo, pues este se refiere a la temprana infancia.

Además, parecía que este mecanismo adolescente de expulsión del nido, se desarrollaba tanto desde el lado paterno como desde el lado de los hijos. En casi todas las especies hay un momento natural en el que tanto padres como hijos no se soportan bien y la lucha por el poder suele llevar a la fragmentación de la familia, favoreciendo la creación de nuevas manadas. Nada como Cronos y menos como Edipo, pero ¿podría existir una tendencia agresiva de los padres hacia los hijos durante la infancia?

Y es aquí donde la Psicología evolucionista echa luces sobre el asunto. Si partimos del hecho de que somos máquinas replicadoras de genes como dice Richard Dawkins, lo esperable de esas máquinas es que protejan sus copias. Aquellas máquinas que no protejen sus copias deben tener menos eficacia reproductiva en el mediano y largo plazo pues sus hijos, copias, tendrían menos chance de sobrevivir.

Es así como luego de una interesante conversación con Antonio Vélez, divulgador científico y escritor del reconocido libro de psicología evolucionista llamado Homo sapiens, llegamos a la conclusión de que es poco probable que exista tanto el complejo de Edipo como el de Cronos; los únicos complejos que sabemos a ciencia cierta que existen son aquellos como el Complejo B o el Complejo de Histocompatibilidad.

Hablando sobre Psicología Evolucionista en Ingeniando de Radio Bolivariana

Carlos Andrés Naranjo Sierra, Psicólogo de PSICOSAPIENS fue invitado este lunes al programa Ingeniando de la Escuela de Ingeniería de la Universidad Pontificia Bolivariana, bajo la dirección del profesor Hernán Toro y la conducción de Lizeth Torres. En éste conversamos sobre los principios de la Psicología Evolucionista y su estado en Medellín y en Colombia.

Temas como el incesto, el egoísmo, el abuso sexual, la promiscuidad y la psicopatía fueron tratados en el programa con la participación de los oyentes que pusieron sobre la mesa sus dudas al respecto y que son siempre bienvenidas pues creemos que de eso se trata la ciencia: de poder cuestionar y exigir pruebas de lo establecido como certeza. Nada es definitivo en términos científicos.

Damos fe de un par de gazapos al final de la entrevista en el que se habla del la promiscuidad en el Homo Sapiens bajo el lente de la selección natural y se menciona la cifra de que cerca de un 10% de los hijos en el estudio no corresponden a su progenitor genético y afirmando que se trata de la madre cuando en realidad se refiere al padre. La madre siempre tiene la certeza de que el vástago es suyo, no así el padre. También sobre las estructuración psíquica a partir del Edipo para psicoanálisis, en las que se menciona neurosis, psicosis y esquizofrenia debiendo reemplazar esta última por la perversión.

Los invitamos a escuchar la entrevista completa haciendo clic aquí.